Capítulo 25

(Narra Carmen)

Durante un mes y poco estuvieron haciendo invitaciones, entregándolas, eligiendo el lugar donde celebrar la boda, la Iglesia, el lugar donde se irían de viaje de novios, trajes, vestidos, zapatos, damas de honor, flores, en fin, organizando aquella boda que todos teníamos tantas ganas de que llegara.

Mi barriga ya se había notado un poco el cambio, normal ya estaba de poco más de cinco meses, me había costado lo suyo elegir el vestido para la boda de las chicas, pero al fin encontré el adecuado, la verdad es que me sentaba genial.

A penas quedaban 14 días, vamos, dos semanas para la gran boda que se celebraría aquí en Londres, todos estaban nerviosos, con ganas de que llegara el gran día y muy agobiados, por eso Liam y yo habíamos decidido llevarlos al parque de atracciones durante toda la tarde, para así divertirse y dejar un poco de lado todo aquello.

Yo no podía montarme en las atracciones, ya que podría hacerle daño al bebé, así que Liam y yo estuvimos dando vueltas por allí con Louis y Paula que estaban con el bebé.

Los demás en cambio corrían como niños de seis años detrás de las atracciones, haciendo colas y gritando hasta dejarse la voz en cada atracción que se montaban.

(Narra Liam)

Decidimos sentarnos en una cafetería, cuando vimos que Harry y Laura salían del servicio y la cara de Laura estaba muy pálida, él la sujetaba, hasta que la dejó caer con cuidado en una silla. Me levanté de la mesa y me dirigí hacía ellos.

-Eh, ¿que ha pasado?

-Ha estado vomitando en el servicio, habrá sido por las atracciones, no sé. - dijo Harry preocupado.

-¿Quieres que vayamos al médico o algo? - le propuse.

-Sí, eso estaría bien, está muy pálida. - dijo Harry.

-No, no, ahora me recupero, es solo que me he mareado de tantas atracciones y dar tanta vuelta.

-Bueno vale, ven vamos a sentarnos con los demás. - dijo Harry ayudándola.

Estuvimos algún rato más en la cafetería hasta que llegaron los otros cuatro, que por cierto estaban agotados de tantas atracciones y se sentaron junto a nosotros.

-¿Qué? Cansados eh. - dijo Louis riendo.

-Ufff, bastante. - admitieron.

-Bueno, pues ahora nos vamos al spa, hemos reservado para ahora, y vamos a llegar tarde. - dijimos Carmen y yo.

-Que buenos amigos que tenemos eh. - dijeron los demás.

[…]

Después de una hora de relax en el spá volvimos a casa.

*Dos semanas después*

(Narrador externo)

Al fin llegó ese gran día, era 16 de Noviembre, el día en el que se darían el “sí quiero” en el altar.

Las chicas se despertaron bastante temprano, las estuvieron maquillando, peinando y de todo, hasta que al fin llegó el momento de montar en el coche hacía la Iglesia.

Los chicos ya estaban allí, esperaban con mucha ansia verlas entrar por aquella puerta y aquel vestido blanco.

Zayn sería el primero en recibir a la novia, el segundo Louis, el tercero Niall y el cuarto Harry.

Empezó a sonar aquella música que sonaba en la mayoría de las bodas.

(Narra Zayn)

Empecé a escuchar de fondo aquella música, esa música la cuál daba la entrada a la novia, me giré y hay la vi a ella, iba del brazo de su padre, y Lux iba delante de ella, era su pequeña dama de honor, ya que mis hermanas aun no tenían hijos, avanzaban lentamente por aquel pasillo que se habría entre todo aquel montón de gente, hasta que al fin estaba cerca de mí.

-Te entrego mi mayor tesoro, cuidalo. - dijo su padre sonriéndome a lo que yo le dedicaba otra sonrisa y asentí con la cabeza a lo que me dijo.

Sujete del brazo a Emma ayudándola a subir aquel pequeño escalón.

-Vas preciosa cielo. - le susurré al oído.

-Te quiero.

(Narra Louis)

De nuevo empezó a sonar aquella música, sonreí para mis adentros y me giré para conseguir verla.

Venía del brazo de su hermano mayor, su dama de honor era la hija de su hermano, morena, de ojos verdes y de unos cinco añitos.

Caminiba lentamente por aquel largo pasillo, cada vez estaba más cerca de mí y yo cada vez más nervioso. Al fin la tenía delante mía.

-Cuidala cuñado. - dijo su hermano dándome una palmadita en el hombre después de haberme entregado a su hermana.

Le agarré del brazo y subimos aquel escalón.

-Estás perfecta. - dije dándole un beso es su mejilla.

-Tú si que estás perfecta. - dijo con una de sus dulces sonrisas.

(Narra Niall)

Estaba muy nervioso e inquieto esperando a que entrase Marta, no aguantaba ni un segundo más estando quieto, pero me tedría que controlar.

Llevaba ya un rato mirando hacía la puerta esperando a escuchar aquella música acompañada de la entrada de Marta y al fin sonó.

Ahí estaba ella, venía del brazo de Liam y delante suya iban los mellizos de mi hermano Greg, chica y chico, eran su paje y su dama de honor.

Se le veía preciosa y cada vez que daba un paso hacía mí se le veía más preciosa aun, llegó el momento, la tenía en frente mía, podía ver sus preciosa sonrisa a escasos centímetros de mí.

Liam dejó caer el brazo del cuál iba agarrado Marta sobre el mío.

-Os deseo lo mejor, hermano. - dijo sonriéndome y yo le devolví la sonrisa.

Mis ojos nada más verla tan cerca mía se me iluminaron tanto, que me calleron dos o tres lágrimas de la emoción, estaba tan preciosa y dulce que no lo podía evitar.

-Tonto, no te me pongas así eh. - dijo quitándome una de las lágrimas que quedaba en mi mejilla rozando su suave dedo con mi moflete.

-Eres increíble, te quiero. - dije ayudándola a subir el escalón.

(Narra Harry)

Solo quedaba por entrar ella, mi pequeña, la quería muchísimo, más de lo que os creéis, detrás de ese Harry mujeriego el cual conoce mucha gente os aseguro que tengo un corazón enorme, y ese corazón lo ocupa ella, esa chica tan preciosa que entraba en ese mismo momento del brazo de su padre, con su dama de honor delante de ella, la hija de mi hermana Gemma, iba tan preciosa como siempre, pero esta vez aun más preciosa.

Poco a poco se iba acercando más, tenía una de esas lindas sonrisas en la cara, la cual me contagió a mí, y se me marcaron mis típicos hoyuelos cerca de los mofletes.

-Sé que eres un buen chico Harry, cuidala bien. - dijo su padre a lo que le dije que sí con la cabeza.

Sujeté su brazo, subimos aquel escalón y la miré a los ojos, tenía los ojos cristalizados, y le empezaron a caer algunas lágrimas por la cara, cosa que me contagío.

-Pequeña, hoy no eh. - dije quitándole las lágrimas rozando dulcemente su carita de princesa.

-Ni tu tampoco cielo. - dijo ella haciendo lo mismo que yo.

-Te quiero muchísimo. - dije a lo que ella besó mi mejilla.

(Narra Liam)

Ya habían entrado las chicas con sus bonitos trajes de novias, la verdad que las cuatro iban preciosas, y ahora entraba Carmen, entraba con William en brazos y con algunas de las hermanas de Louis y de Zayn, iba preciosa, llegó y se sentó a mi lado, a escuchar la misa, la cual uniría a nuestros amigos.

-Vas preciosa princesa.

-Hablaste.

Le di un pequeño beso en los labios y empezamos a escuchar lo que decía el sacerdote.

[…]

La misa estuvo, ¿cómo decirlo? Genial, sí, esa palabra exactamente, fue bastante divertida, pero también seria, claro, también hubo gente emocionada y tal, como en todas las bodas.

Ya estábamos todos en el combite, los diez estábamos sentados en la misma mesa, la comida estaba deliciosa, y llegó el momento de emocionar los novios a las novias.

Empezó Harry con una pequeña carta.

“Pequeña, únicamente quería darte las gracias por haberme enseñado a amar de verdad, por todos esos días que hemos pasado juntos, por todos esos besos, abrazos, porque ¿sabes? Eres lo mejor que me ha pasado sin duda alguna, eres esa chica a la que todo chico buscaría. Me encanta estar contigo, reírme por cualquiera de tus tonterías, tirarte a la piscina y que te enfades conmigo, pero no poder estar más de un minuto sin besarme, pelearme de broma contigo, coger y apretar con fuerza de tu mano, robarto los besos, mirarte a los ojos mientras me hablas, protegerte, hacerte cosquillas, que cuando tenga un mal día me abraces sin yo tener que decirte nada, que te pongas mi ropa, burlarme de ti, que te enfades conmigo por tonterías, porque todas esas cosas, hacen que mi corazón vaya a cien, tu eres la que he elegido, la que he elegido para pasar el resto de mi vida a tu lado, con la que tener hijos y nietos. Te quiero muchísimo pequeña.”

Esa era la carta de Harry, Laura era muy afortunada al tener Harry para ella, es un gran tío, es una caja de sorpresas, pero de los mejores que he conocido.

Laura se había emocionado con aquella carta, le dió un gran abrazo allí y un beso que con el cual todo el mundo empezó a decir el típico “oooooooh, que bonito”, haciendo un pequeño coro vamos.

Después de éste le tocaba a Niall, le había preparado una canción con la guitarra, nada más con la primera frase Marta se había echado a llorar, de emoción claro, los ojos de Niall le brillaban más que nunca.

-Eres lo más grande que tengo cielo, siempre te voy a amar. - dijo nada más terminar la canción y fue hacía Marta ha darle un abrazo, de esos que toda chica quiere de Niall, el Horan Hug.

Nada más bajar del escenario subieron Laura y Harry, tenían que dar una noticia y ya luego subirían Louis y Zayn.

-Nosotros queremos deciros algo. - empezó Harry abrazando a Laura contra su pecho.

Éste capítulo se lo dedico a Natalia Arana Baena y Bridget Horan Somerhalder :') Espero que os haya gustado y si queréis siguiente ya sabéis pedirlo por aquí por el blog.

¿Que tendrán que decir Laura y Harry? Sorpresa, jajaja :P

Y bueno que cada vez tengo menos comentarios, subiré el siguiente si llego a los cinco comentarios (en el blog).

Bueno un beso, os quiero. <3