(En
capítulos anteriores)
Todos
al vernos salir se levantaron de un salto, me fijé en quién tenía
a nuestra pequeña Sarah, la tenía en brazos Louis que estaba al
lado de su mujer, Paula, ella sostenía a William.
-Bueno,
¿nos vais a decir ya los resultados? - dijo Niall dando pequeños
saltitos de lo nervioso que estaba.
(Narra
Liam)
-Chicos..
- dije agachando la cabeza.
-¿Qué
pasa tío? - preguntaron todos bastantes preocupados.
Sí,
se me daba muy mal mentir, intenté gastarles una broma, cosa que fue
imposible, me empecé a reír en el momento menos adecuado.
-¡QUÉ
ESTOY TOTALMENTE RECUPARADO! - dije gritando felizmente a lo que
todos se abrazaron a mi bastante contentos por la noticia.
-Bueno,
¿vamos a celebrarlo, no? - intervinó mi princesa ya con la pequeña
entre sus brazos.
-Claro.
- respondieron todos.
Fuimos
a comer algo a Pizza Hut, reservamos una sala solo para nosotros, era
una sala en la que incluía karaoke y pasamos todo la tarde allí
cantando, bailando y riendo.
Llego
el momento de volver a casa, al fin volvía a pisar mi hogar junto a
mi mujer y mi hija, echaba de menos el estar tranquilamente allí
tumbado en el sofá junto con mis dos pequeñas.
-¿Qué
hacemos cama o sofá? - preguntó mi princesa.
-Primero
vamos a duchar a la pequeña y a dormirla y luego vemos lo que
hacemos, ¿vale?
-Buena
idea.
Subimos
a la planta de arriba y metimos en la bañera a la pequeña, le
encanta juguetear con el agua, pero hoy se cansó rápido, la verdad
es que había sido un día muy largo y agotador. Le secamos, le
pusimos su crema y su pijamita. Carmen se sentó en la cama para
dormirla, y yo me senté junto a ella para cantarla la nana que solía
cantarle todas las noches para que se durmiera, y como habitualmente
pasaba se quedó dormida rápidamente, era muy buena.
-Me
voy a dar una ducha yo también pequeño, enseguida vuelvo. - dijo
dándome un beso en los labios.
No
hizo falta esperarla, sabía que le encantaba estar en la ducha y que
tardaría bastante tiempo, así que decidí meterme junto a ella.
-Eh,
¿pero que haces aquí pequeño? - dijo riendo tímidamente.
-¿Qué
pasa te da vergüenza ducharte junto a mí o qué?
-Como
si no me hubiese duchado más veces ya contigo. - dijo soltando una
pequeña carcajada.
-Llevas
razón. - dije riendo yo también.
-Te
quiero. - nada más que terminiar de pronunciar esas dos dulces
palabras la besé, la besé como si no hubiese un mañana, echaba en
falta momentos así junto a ella, y no hacía más que aprobecharlos,
porque la experencias de la vida me han enseñado, que un día puedo
tenerlo todo y al siguiente no puedo tener nada, así que mejor
aprobecharlo todo al momento, vivir al límite.
-Te
amo.
Ella
se abrazó dulcemente a mí, yo la apreté contra mi pecho más
fuerte aun no quería soltarla, la quería tanto.
Después
de un largo silencio intervine.
-¿Qué
tal si nos salimos? Mis dedos se han echo pasas de estar tanto tiempo
metidos en el agua y por lo que veo a ti también. - dije riendo.
-Más
vale, sí.
La
ayudé a salir de la bañera y le puse la toalla por alrededor suya,
mientras que ella me ponía a mi otra toalla alrededor de mi cintura.
Nos
secamos y ella se puso una de esas camisetas mías que le quedaban
enormes y yo simplemente me quedé en calzoncillos, era la forma más
cómoda de dormir, porque frío nunca pasaba.
-Pequeño
vamos al sofá, porque sino vamos a despertar a la pequeña, ¿vale?
Yo
asentí y me acerqué a ella, le besé la frente y de la mano bajamos
al salón. Nos tiramos los dos en el sofá, y nos quedamos un buen
rato abrazados el uno al otro, nadie nos podía separar.
Ahora
estoy asimilando todo lo que me ha pasado durante todo este tiempo,
durante cerca de un año, o incluso más, no lo sé, la verdad no
recuerdo exactamente cuando empezó todo esto, solo recuerdo que fue
por una estúpida borrachera, que he estado apunto de morir, y de
perderme de muchas cosas que no querría perderme, pero ahora, hoy,
me han dado la noticia de que estoy recuperado, que por fin estoy
sano, que al fin todo esta pesadillla ha acabado, no puedo estar más
feliz de lo que hoy ya lo estoy, voy a poder disfrutar de mi princesa
hasta el fin de los días, ver como mi pequeña Sarah crece, conocer
a mi nuevo hijo Chest, tener más hijos con mi princesa, seguir
disfrutando de mis sobrinos, Ash, Zac y Kris, seguir estando con mi
familia, disfrutar de la música con mis cuatro hermanos y mis
queridas directioners, puedo seguir disfrutando de toda una vida.
Mi
princesa se había quedado profundamente dormida sobre mi pecho en el
sofá, no quería despertarla, así que la cogí en peso y la llevé
a nuestra habitación, la dejé caer en la cama y la tapé con la
manta, seguidamente me metí yo junto a ella, y como todas las noches
dormí abrazado a ella.
[…]
Me
desperté con el llanto de la pequeña Sarah, antes de cogerla miré
el reloj, eran las diez y media de la mañana, cogí a la pequeña y
le dí el biberón.
Justo
se despertó mi princesa y llamaron a la puerta, fui a abrir pensando
que serían algunos de los chicos, pero no, eran tres pequeñajos que
se abalanzaron sobre su tío, al que hacía ya algunos meses que no
veían.
-¡Tito
Liam! - gritaron los tres pequeñajos, Ash, Kris y Zac.
Se
alegraron mucho de verme y yo también de poder volver a verles,
porque la última vez que los ví pensé que no los vería más, pero
aquí estoy, junto a ellos.
-¿Cómo
están mis sobrinos favoritos? - dije abrazando a los tres.
-Bien,
aunque te echábamos de menos. - dijo Ash que era la más charlatana
de los tres, mientras que los mellizos asintieron a lo que decía su
prima la mayor.
-Yo
quiero ver también a la tita Carmen y a la prima Sarah. - dijo
timidamente la pequeña Kris.
-Pero
mira si es el pequeño de la familia. - dijo Ruth entrando por la
puerta seguida de Nicola, mamá y papá.
-Hombre,
mis queridas hermanos y mis padres, que conste que os he echado de
menos eh. - dije abrazándolos.
Les
invité a pasar al salon, mientras que ellos se acomodaron yo fui a
buscar a mi princesa y a Sarah.
-Ven,
vamos a bajo que están mis padres y mis hermanas. - dije dándole un
beso.
Cogí
a la pequeña en brazos y Carmen bajaba detrás mía. Saludó a toda
mi famlia, bueno ahora también era la suya, y la verdad es que se
llevaban muy bien.
[…]
Pasaron
aquí toda la mañana junto a nosotros, y después de comer todos
juntos aquí en casa, tuvieron que irse.
-Los
chicos están allí todos juntos viendo algo, ¿vamos con ellos? - me
preguntó mi princesa.
-Uf,
me da pereza levantarme del sofá. - dije bromeando.
-Venga
no me seas vago. - dije agarrándole de la mano para que se
levántase.
Llegamos
junto a los demás y nos sentamos a hablar junto a ellos.
(Narra
Laura)
Hoy
llevaba un día agotador, por día la barriga me pesaba más y más,
apenas podía moverme, me pasaba todo el día del sofá a la cama y
viceversa, y siempre con la ayuda de Harry, menos mal que lo tenía a
él, no sabría lo que hacer si no formase parte de un vida, es lo
más grande que tengo.
-Cielo,
¿te veo pálida te encuentras bien? - dijo acariciándome con una
mano la mejilla y con la otra la barriga.
-Sí,
no te preocupes cariño. - dije con un poco de dificultad al
respirar.
-No,
tu no estás bien, vamos al médico anda pequeña.
-No,
Harry, seguro que ahora me encuentro mejor, descanso un rato aquí y
si me sigo encontrando mal pues ya vamos, ¿vale?
-Bueno
vaaale. - dijo resignado.
Le
di un beso en la mejilla y me quedé abrazada a él.
Le
empecé a dar vueltas a la cabeza, y no sabía porque tenía tantos
dolores y dificultad en respirar y moverme, apenas acabo de entrar en
el octavo mes de embarazo, aun me quedan un mes más, aunque
realmente estaba bastante gordita ya.
Empecé
a prestarle atención al tema sobre el que hablaban los demás. No
sabía exactamente sobre lo que hablaban, así que decidí preguntar.
-No
me he enterado de nada, ¿de qué habláis?
-¿Tú
tampoco me notas ningún cambio? - intervino rápidamente Emma.
La
observé de arriba abajo, pero no observé nada nuevo en ella, quizás
la notaba un poco más gordita pero nada fuera de lo normal,
simplemente que antes estaba demasiado delgada.
-Mmmm...
la verdad es que no quizás un poco más rellenita, pero sigues con
tu cuerpo en línea.
-¡Por
fin alguien se da cuenta! - dije dirigiéndome a Zayn, el cuál no
podía parar de reír.
-Vale
yo no os entiendo, decid lo que tengáis que decir ya. - dijo Marta
desesperada.
-¡Qué
estoy embarazada! - soltó al fin Emma.
-Estábamos
esperando a que alguno de vosotros se diese cuenta, pero por lo que
veo ninguno os habéis fijado, y ya está de cuatro meses eh. - dijo
Zayn riendo.
-Dios,
¿y cómo no nos hemos dado cuenta? - nos preguntábamos todos
confusos.
Al
fin lo acabamos asimilando, y nos contó que estaban esperando
gemelas.
HOLIS<3.
Sí lo sé otra vez he tardado en subir, pero es que no sé de donde
sacar el tiempo, estoy muuuuuuy agobiada, pero bueno siempre que
pueda subiré capítulo, y lo siento si no es muy a menudo :S
Bueno
espero que os haya gustado cielos y que me dejéis un comentario aquí
abajo que la vez anterior solo me dejaron uno o dos, dejadme alguno
más anda.
Muchas
gracias a todas las que seguís leyendo la novela, y bueno voy ha
hacer un evento por si hay nuevas lectoras y también os lo he puesto
en el comentario que me respondaís para ver si queréis que os siga
avisando, porque aviso a mucha gente que nunca me responde y no sé
si la lee, solo quiero que me respondáis a ese comentario para saber
si tengo que seguir avisando, respondedme el comentario lo antes posible, por favor<3.
Un
beso enorme, OS QUIERO.