(En
capítulos anteriores)
Abrí
la puerta, pero no, no eran ellos, era una chica, su cara me sonaba
de algo, pero ahora mismo no conseguía recordar de qué.
-¡Hola!
- dijo ella sonriente.
-Hola,
¿quién eres? - le pregunté a la chica.
(Narra
Carmen)
-¿Puedo
pasar y hablamos? Es importante. - dijo la chica.
-Claro,
pasa.
Le
abrí paso, y la invité a sentarse en el sofá, saqué dos pepsi's y
empecé a hablar.
-Bueno,
¿sobre qué quieres hablar conmigo? - dije yo intrigada.
-Es
respecto a Liam.
-Te
escucho.
-¿Te
acuerdas la vez esa que los chicos estuvieron en Florida y sacaban a
directioners del público para que ellas le hicieran preguntas?
Puse
los ojos en blanco, intentando recordar aquél día.
-Mmmmm...
ah sí, ya lo recuerdo.
-Pues
yo soy Vannesa, la chica que salió a darle un abrazo a Liam. - dijo
la chica sonriendo al recordar aquél momento.
*Podéis
recordarlo en el capítulo 15*
-Me
acuerdo de ti. - dije devolviéndole la sonrisa.
-Bueno
eso solo te lo decía por ver si me recordabas, pues bueno a lo que
iba, que llevo varias semanas haciéndome pruebas y hace apenas unas
horas me dieron los resultados y puedo donarle uno de mis riñones a
Liam, además no quiero nada a cambio, lo único que quiero es que
seáis felices, que disfrutéis de vuestros hijos juntos. Liam hizo
que mi sueño se cumpliese, abrazarlo a él y estar en un concierto
de mis ídolos, de esos cinco chicos por los que haría cualquier
cosa, y encima con ellos en el escenario, me hizo pasar una
experiencia incréible, algo que nunca olvidaré, y yo quiero hacer
esto por él, por ti, por Sarah, por el bebé que viene en camino y
por todos vuestros seres queridos, además para nosotras las
directioners sería terrible que Liam falleciese, él es nuestro
modelo a seguir, ya no lo tendríamos a él como referencia, no
podríamos seguir sus pasos, además muchas no podrían soportar la
muerte del chico que siempre le saca sonrisas, el chico que les hace
ser más fuerte día a día yo soy un ejemplo y hay muchos más,
muchos.
No
pude evitar emocionarme al escuchar todo lo que decía esta increíble
chica, derrochaba tanto amor y cariño con tan solo una mirada.
-Vannesa
no tengo palabras para ti, en serio, eres tan increíble, deberían
de haber más personas como tú en éste mundo, muchísimas gracias
de verdad. - dije abrazándome a ella.
-De
verdad Carmen no tienes que dar las gracias, él se lo merece que lo
haga, es la única persona de éste mundo que SIEMPRE me ha sacado
una sonrisa sin ni siquiera estar a mi lado.
-Se
nota que eres una verdadera directioner, te comprendo totalmente, a
ti y a todas, yo también soy directioner.
-Gracias,
tú también eres una verdadera directioner Carmen.
-Bueno
y... ¿ya sabes las consecuendia que puede tener todo esto? - dije
algo preocupada.
-Sí,
ya me han informado sobre todo lo que puede pasar y sigo diciendo que
le donaré uno de mis riñones a mi ídolo; sí me pasa algo, por lo
menos sabré que he hecho felices a muchísimas personas haciendo
esto, nunca me voy a arrepentir
No
pude evitar el volver a abrazarla, cada palabra que salía de su boca
era increíble, con cada palabra conseguía sorprenderme cada vez
más.
Estuvimos
un rato hablando sobre el tema, hasta que llegaron los chicos y las
chicas.
-¡CHICOS!
Que ya no hace falta buscar más, ¡tenemos a la donante! - dije
eufórica al ver a los chicos.
-¿QUÉ?
- dijeron todos quedándose con la boca abierta y los ojos como
platos.
Les
expliqué todo y rápido nos fuimos al hospital.
Nada
más llegar los médicos nos digeron que estaban a punto de empezar
la operación de Liam, que estaba muy débil y que necesitaba el
transplante urgentemente.
-Chicos
id vosotros a la cafetería ahora os alcanzo yo. Vanessa ven conmigo.
- dije.
Vannesa
y yo empezamos a correr lo más rápido que podíamos hasta llegar a
la habitación de Liam, 444, bien, creo que lleguamos a tiempo.
(Narra
Liam)
Me
lleve más de veinte minutos peleando con los doctores porque no
quería que me donase el riñón de danielle, y pasar toda una vida
sin ver a mi princesa, ¡no! Pero no conseguía hacerles cambiar de
opinión, y como pudieron me llevaron a la sala de operaciones.
Justo
cuando me fueron a poner la anestesia entró alguien en la sala, era
mi princesa.
Solo
había pasado una semana de que no la veía, la echaba tanto de
menos, necesitaba volver a sentir sus besos o que me abrazace como
solo lo sabía hacer ella.
-¡Parad!¡No
hagan nada! - dijo ella al entrar en la sala.
Los
médicos intentaron echarla de la sala, cosa que yo impedí.
Se
acercó a mí, y me dio un pequeño beso en los labios acompañado de
un “te quiero”, y así dibujándome una enorme sonrisa en la
cara.
-Señorita
tenemos que empezar con la operación. - volvieron a decir los
médicos insistiendo.
Justo
en ese momento me quedé dormido a causa de la anestesia.
(Narra
Carmen)
Les
expliqué todo lo que había pasado a los médicos, aunque ellos
insistían en que no podrían hacer eso, que ya estaba todo preparado
para el tranplante y Vannesa no sería la donante, pero a base de
insistir cada vez más acabaron aceptando.
Tumbaron
a Vannesa en la camilla, y empezaron con aquella complicada
operación.
Me
quedé apenas cinco minutos en la sala, los cuales se me pasaron
eternos, estaba muy extresada, la pesadilla que acababa de tener hace
apenas una hora no paraba de dar vueltas en mi cabezas.
Sin
más salí de la sala en busca de Sarah, mientras me dirigía a la
sala en la que se encontraba me entraron unos dolores muy fuertes en
la barriga, náuseas y mareo, seguramente todo esto me pasaba por
apenas haber descansado, ni comido en toda la semana.
Intenté
dar un par de pasos más pero me caí al suelo.
(Narra
Louis)
Estábamos
todos en la cafetería esperando a Carmen, ya había pasado más de
media hora y no llegaba, Paula y yo decidimos ir a buscarla, por si
había algún que otro problema.
Íbamos
los dos riendo por los pasillos entre besos y chistes, cuando nos
encontramos a Carmen tirada en el suelo, estaba inconsciente.
Paula
corrío a llamar a algún doctor y yo la cogí en mis brazos. Pocos
segundos después aparecieron algunos médicos que se ocuparon de
ella, la llevaron a una sala y empezaron a hacerle bastantes pruebas
para saber lo que le acababa de pasar.
(Narra
Laura)
Todos
estábamos bastante preocupados, por Liam y por Carmen. La operación
de Liam por ahora iba sobre ruedas, todos teníamos la esperanza de
que saldría bien. En cambio Carmen no estaba nada bien, estaba
bastante débil de salud.
(Narra
Niall)
Ya
habían padado algunas horas y nos llamaron los médicos.
-La
operación a salido genial, mañana mismo le daremos el alta a Liam.
- dijeron.
Esas
palabras me acababan de hacer muy feliz, pero por otra parte tenía
en mi cabeza a Carmen, estaba bastante mal y ahora no sabría como
decirselo a Liam, sería un golpe muy fuerte para él en este
momento, después de esta operación.
-Oye,
¿y Vannesa, la chica que le ha donado el riñón a Liam, está bien
o no? - preguntó Zayn.
-Ahora
mismo no estamos autorizados a dar ningún tipo información sobre
esta chica, lo siento. - dijeron los médicos y seguidamente se
fueron.
Estaba
ausente.
-Eh,
cariño, ¿qué te pasa?¿No estás feliz por Liam? - me dijo Marta
cogiéndome de las manos.
-Sí,
estoy muy feliz por él, no te imaginas cuanto, sabes que para mi es
mi hermano, pero le tendremos que contar lo de Carmen, ella esta mal.
- dije cabizbajo.
-Pequeño,
ella es fuerte y con la ayuda de todos nosotros lo podrá superar ya
verás. - dijo abrazándome y acariciándome el pelo.
-Gracias
por estar a mi lado siempre y hacerme sonreír, te quiero.
[…]
Poco
después el doctor nos dijo que ya podíamos entrar a ver a Liam, que
acababa de despertar, pero que necesitaba descansar que no lo
dejásemos moverse demasiado.
*Todos
pasamos dentro*
-¡Liam!
Tío al fin estás bien. - dije dándole un abrazo y seguidamente
todos empezaron a abrazarlo.
-Sí,
al fin. - dijo el sonriente, pero su mirada estaba buscando a
alguien, exactamente a Carmen.
-Oye,
¿y mi princesa? - dijo el continuando con la mirada perdida.
*Se
produjo un silencio en aquella sala*
Liam
me miró a mi fijamente a los ojos, sabía que con eso no podía, que
tendría que contarselo.
-¿Dónde
está?¿Qué le ha pasado? - volvió a repetir.
-No
es nada grave Liam, ha tenido un simple desmayo por la presión de
tanta espera. - dije mintiéndole intentando que no se notarás, pero
el me conocía bastante bien y creo que se dió cuenta de que le
estaba mintiendo, que esa no era la verdad.
-Niall,
te conozco de sobra, no me mientas, dime la verdad, tú o cualquiera
de vosotros, tengo que saberlo. - dijo un poco nervioso.
-Carmen
está muy débil, están haciéndole bastantes pruebas y pronto
saldrán los resultados para ver lo que tiene. - dije.
-¿En
qué sala está? Necesito verla, por favor. - dijo levantándose de
la camilla, a lo que todos los que estábamos en aquella habitación
nos abalanzamos sobre él para que volviese a tumbarse en la camilla.
-No
puedes moverte de la camilla Liam, tienes que recuperar fuerzas,
acaban de hacerte una operación bastante cumplicada, en cuanto cojas
fuerzas te llevaremos junto a ella, pero ahora mismo no, así que
descansa, cogé fuerzas y así podrás verla. - dijo Harry.
Nos
llevamos un buen rato intentando convencerlo, y al fin logramos que
entrara en razón y se quedó dormido.
¡HOLA!
Teníais ya ganas de el capítulo 33 eh :P
Espero
que os haya gustado y como siempre, dejadme vuestra opinión sobre el
capítulo aquí abajito en un comentrio, y por favor las que soléis
comentar, no dejad de hacerlo; que todas podéis comentar desde
anónimo.
Algunas
de las ideas del capítulo me las ha dado Aitana Tristán, y ahora
podré alargar un poco más la novela, así que darles las gracias a
ella,jajaja, bueno este te lo dedico a ti.
Y
también se lo dedico a mi Moli, que la quiero mucho.
Bueno
que eso que dejad el comentario aquí abajo y que os quiero mucho. <3